Cuando hablamos de comprobar el gas y las instalaciones en los pisos de alquiler, suelen surgir cientos de preguntas: ¿cuándo hay que llevarlas a cabo? ¿Qué precio tienen? Y lo más importante, ¿quién tiene que asumir la responsabilidad?
En una propiedad de alquiler, es importante que conozcamos todos los detalles desde el principio, para evitar confusiones. El caso de la renovación de calderas es uno de los casos más básicos, y debemos tener toda la información posible. Es decir, en materia de revisión tenemos que distinguir dos partes importantes: la parte de electrodomésticos por un lado, y la parte de instalaciones de gas por otro, dos términos diferentes, verificados en diferentes aspectos.
¿Qué es una inspección de caldera y cuándo se pasa?
Hoy en día, puedes encontrar varios tipos de calderas de gas para diferentes combustibles gaseosos y con características y tecnologías muy diferentes. Es importante elegir el modelo que mejor se adapte a nuestras necesidades, ya que la calefacción es el consumo energético que más repercute en la factura, por lo que podemos ahorrar más en gas.
La remodelación o mantenimiento de calderas es una forma de revisar y verificar el correcto funcionamiento de tu termo, caldera y calentador. Debe ejecutarse cada 2 años y siempre debe ser supervisada por la propia marca o por un técnico titulado independiente.
¡Atención! Debido a las especificaciones importantes, si su caldera tiene más de 70kW, debe inspeccionarse anualmente y los calentadores de más de 11 litros cada 5 años.
En este apartado también se recomienda que si tu equipo de aire acondicionado no supera los 12 kW, debe ser inspeccionado cada 4 años. Al igual que ocurre con las calderas o los calentadores, suele ser la propia marca la que presta los servicios de mantenimiento y modificación.
¿Qué pasa con otro tipo de calderas (por ejemplo, gasóleo, pellets…)? En estos casos se recomienda un funcionamiento anual, pero siempre debemos consultar las especificaciones del fabricante y su manual de mantenimiento para un uso adecuado.
Es importante revisar periódicamente la caldera porque nos ayuda a evitar y prevenir averías y errores en el funcionamiento del equipo.
En cuanto al coste de este tipo de comprobaciones, normalmente libres, cada marca y empresa construye su propio tráfico, incluyendo en muchos casos la reparación de piezas defectuosas o dañadas. Podemos encontrar costes a partir de 95 euros. No es obligatorio contratar la reparación de una caldera con la propia marca, esta puede ser realizada por técnicos independientes, aunque certificados.
¿Qué es una inspección de instalación de gas y cuándo se pasa?
Las inspecciones incluyen la homologación de las instalaciones de gas en general, tales como: el correcto funcionamiento de los manómetros, el estado de las tuberías, llaves, gomas… Son obligatorias, excepto en el País Vasco donde se realizan cada cuatro años. , el resto de comunidades deben pasar cada 5 años. Al igual que las enmiendas, estas deben ser aprobadas por un técnico calificado y, de hecho, lo más común es que los proveedores se comuniquen con los usuarios para informarles de la fecha de cumplimiento.
En cuanto a las tasas de inspección de las instalaciones de gas, esta se divide en dos
conceptos:
- Por un lado, están las tasas administrativas a cargo del concesionario, que son fijas
(15,49 €) y se deben pagar siempre. - En cambio, si pasamos la inspección de la empresa suministradora, cuyo coste está
regulado por el municipio donde se encuentra el inmueble, por el contrario, si
optamos por pasar la inspección de una empresa externa, el precio será el acordado
por las partes.
Si tienes una instalación de gas butano, de igual manera debes tener un certificado de
inspección oficial en vigor con una vigencia de 5 años para cumplir con la normativa y evitar
posibles accidentes. Cualquier instalación de gas requiere un ‘Certificado Oficial de
Inspección de Gas Butano‘ para comprobar su buen estado y la seguridad del propietario.
Respecto a la inspección técnica de gases, hay un aspecto esencial, siendo el más
importante la seguridad. Las noticias falsas son un lugar común a nuestro alrededor, por lo
que aquellos que vienen a inspeccionar los productos sin el aviso de nuestros proveedores,
no se les debe abrir la puerta. Por otro lado, para evitar este tipo de estafas, la tasa de
inspección nunca se paga al técnico que acude a la puerta, sino que la cobra la empresa
suministradora en el siguiente recibo. Si has contratado este servicio con un tercero, se hará
de la misma forma y tendrás que contactar con la empresa suministradora para gestionar el
pago revisado.
¿Quién pagará la inspección de gas si vivo de alquiler?
Los propietarios de propiedades de alquiler deben asegurarse de que las inspecciones se realicen a tiempo y son responsables de pagar las tarifas de inspección.
Tanto la inspección de la instalación como la inspección de la caldera están relacionadas con la habitabilidad del domicilio, por lo que se recomienda que el propietario de la vivienda de alquiler se haga cargo de las mismas.
